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10 Lecciones de Liderazgo de Mandela II

· Liderazgo,Actitud,Mandela

Como regalo adicional al post anterior, te comparto algunos ejemplos inspiradores:

En una ocasión, invitó a cenar al su guardaespaldas junto con su esposa. Cuando saludó a ella le dijo ‘¿De dónde ha sacado a este hombre tan extraordinario?'

Nunca se olvidaba de la gente que lo había tratado bien. Siguió en contacto con su antiguo carcelero de Robben Island por mucho tiempo.

Mientras estuvo en la cárcel aprendió el idioma de los 'blancos' (el afrikáner). El comentaba que si quería unir a Sudáfrica, debía hablar el idioma de sus adversarios.

En otra ocasión, tuvo un encuentro con el Papa, y como de costumbre fue acompañado por su guardaespaldas. Cuando se encontró con su santidad, Mandela se dió vuelta y le presentó al guardaespaldas para este lo saludara. Esto generó un recuerdo indeleble para su colaborar.

En una oportunidad, invitó a un empleado suyo y a su familia a cenar. Al llegar la familia, se dirigió a la esposa de este y le pidió disculpas por ‘Haber hecho trabajar tanto a su marido. Por haberlos privado demasiado de su compañía como padre y esposo’. Y luego remató, ‘Pero ha realizado un trabajo excelente.’

Cuando tomó el poder, su partido quería cambiar el himno nacional, dado que el viejo himno era un símbolo del régimen apartheid. Mandela se negó y en su lugar decidió que conviviera el himno antiguo con el nuevo. De esta manera generaría unión y no diferencias.

Lo mismo ocurrió con el equipo de rugby, el cual era sinónimo de la dominación blanca. Referentes de su partido político querían cambiarle el nombre y el escudo. Ante lo cual nuevamente Mandela se negó, argumentando que los blancos disfrutaban mucho de ese deporte y el cambio iba a causar daño y rencores.

En una entrevista periodística, pidió disculpas a un periodista porque lo habían hecho trabajar duro, a lo cual el periodista respondió, ‘Pero no se compara con lo que usted trabaja’, Mandela replicó, ‘Pero yo estuve descansando 27 años en la cárcel’.

En una reunión con el capitán del equipo de rugby, Mandela le comentó ‘Ud. tiene un trabajo muy importante’. Este respondió, ‘Pero no se compara con el suyo’, a lo cual Mandela dijó ‘Pero en mi trabajo, a mí, nadie me quiere 'arrancar' la cabeza como a ud.’

Aquí demuestra 3 cualidades importantes:

  1. Bajar de las alturas para ponerse al nivel del otro.
  2. Apreciar, esto implica aumentar el valor de los demás.
  3. Hacer sentir cómodo a la otra persona.
Mandela fue un maestro de las relaciones humanas y por ello ha quedado en la historia como uno de los grandes líderes mundiales y fue un ejemplo para millones de personas.

Espero que lo hayas disfrutado. Como ves, no se trata de cosas sobrehumanas, son cosas que tú y yo podemos hacer, solo precisamos voluntad, determinación y práctica.

Autor: Esteban Coluccio