Estás apurado y de repente te encuentras en el medio del tráfico sin poder escapar. Estás por irte a encontrar con un amigo cuando te llama tu jefe precisando revisar el reporte que le enviaste a primera hora. Que bronca !!!
Durante el día estás expuesto a millones de estímulos, algunos son positivos, otros neutros y otros negativos. Evaluar que acción tomar en cada caso, generaría un gasto enorme de energía, es por ello que tu cerebro te dice que repitas lo que sueles hacer en situaciones similares, o sea, que pongas el piloto automático.
Esto está bien para muchos casos, pero en algunas situaciones esta reacción te juega en contra. Por ejemplo, cuando alguien te critica quizás tu reacción automática sea defenderte y contraatacar o quizás quedarte callado sin responder (respuesta de fight or fly). Esta respuesta no te está ayudando y la precisas modificar.
Para esto Estanislao Bachrach en su libro En Cambio, nos regala una técnica que la llama Poner Pausa y esta consta de 3 simples pasos:
Paso 1
Corta el contacto visual con la persona o situación: aléjate del lugar, da una vuelta a la manzana, ve a la cafetería, si no es posible, puedes cerrar los ojos por unos segundos.
Paso 2
Respira profundo: haz 2 o 3 respiraciones profundas, cuando te invaden emociones negativas tu respiración suele ser superficial, se agita, y esto genera que menos oxígeno llegue a tu cerebro, por lo tanto tiendes a reaccionar y no a buscar nuevas alternativas.
Paso 3
Postura: cuando tienes emociones negativas te sueles encorvar y esto propicia una respiración agitada. Presta atención a tu postura, pon la columna derecha/recta, una buena postura favorece a disolver las emociones negativas y de este modo a no reaccionar en forma automática.
Espero que te sirvan estos 3 simples pasos y que los conviertas en un hábito. Y la próxima vez que te encuentres en una situación compleja Pongas Pausa.
Autor: Esteban Coluccio
